Los Fresnos

Esta obra se construyó sobre un terreno triangular bajo la influencia del maestro Barragán. Como tributo por ser uno de los arquitectos más importantes de México, se dejó, en las fachadas, algo de su inconfundible estilo como son los gruesos muros de colores brillantes, aberturas dosificadas, acabados con textura y cortes rotundos que hacen de Los Fresnos no sólo un conjunto residencial, sino parte del paisaje de Las Arboledas, Estado de México.

El hermoso muro de piedra no pasa desapercibido, su presencia mineral narra que el hombre, esa criatura compleja que gusta de crear su propio espacio, encuentra en los elementos que la misma naturaleza provee la materia orgánica para construir sus habitaciones y darle sentido a su identidad individual y cultural que lo hacen existir ante los otros.

Mientras en el exterior se respira el espíritu vibrante de la arquitectura moderna que tanto nos caracteriza ante el mundo, en el interior se aprecian techos altos sostenidos por muros de tonos blancos y uniformes. Es adentro donde las formas geométricas, que dan dimensión al espacio, conviven con la existencia misma del habitante y sus posesiones.